Procesos

Parte 1

Parte 2

Documentación de soporte

Editorial

El proceso de producción de una aplicación TIC debe modelarse en función de los contenidos, de la organización y del presupuesto. Pueden influir otros factores como el calendario, los usuarios con características especiales, los condicionantes tecnológicos, etc. El proceso deberá ajustarse a la dimensión que garantice su ejecución. Muchas veces esta dimensón no puede ser alterada y por tanto no se podrá adecuar a las necesidades de una producción «ideal». El equilibrio entre lo que se puede hacer y lo que se necesita es una tarea compleja incluso en aplicaciones de poca dimensión. Es por ello que debe prestarse una especial atención al diseño de los procesos con los que se llevará a cabo el proyecto.

Si el proceso lo abordamos desde su inicio por capas deberemos atender a las dependencias que se crean en cada una de ellas y entre cada una de ellas.

Es aconsejable en este caso comenzar por establecer las características de los contenidos que soportará la aplicación. Estos contenidos sujtan una porcentge significaivo de los requerimientos de los usuarios y de los condocionantes que pueda imponr el mercado al que se dirige la aplicación. Es habitual omitir este aspecto o bien no diferenciarlo suficientemente del comportamiento o del diseño funcional. Hasta tal punto que en muchas ocasiones se diseña antes el sistema de navegación que la estrucura de la información. Omitir los aspectos del diseño relacionados con el contenido se convierte así en una desatención a los requerimientos de los usuarios y las referencias del mercado, y provoca una falta crónica de definición en la estructura de la aplicación.

La estructura de datos de la aplicación condiciona el comportamiento dependerá en gran medida de las infraestructuras que pongamos a disposición del desarrollo y de la aplicación en la fase de explotación. Grandes cantidades de datos residentes en un servidor dedicado requiere de una infraestructura acondicionada para ello.

El comportamiento de la aplicación o bien el sistema de interacción con los contenidos depende de la estructura y de la tecnología disponible, para las interfaces. El comportamiento del programa y su representación pueden resolverse en el grado de calidad que admite el equipo de diseñadores de la organización. Es frecuente encontrarse con limitaciones en el diseño que no han sido impuestas por la tecnología o el presupuesto y que sólo recogen algunas deficiencias en el perfil de los diseñadores. Estas deficiencias suelen estar relacionadas con sus conocimientos técnicos y una falta de cultura de la moda.

Definida la interfaz, puede evaluarse la dimensión del proyecto y se pueden planificar las tareas. En esta fase las dificultades suelen proceder del cáculo del presupuesto y del ajuste del calendario. Respecto al presupuesto se considera crítica la capacidad de financión que la orgnización tiene para abordar el proyecto. Si la dimesión del proyecto es excesiva para capacidad de financiación de que dispone la organización se generaran tensiones derivadas de la actuación de los diferentes perfiles en producciones simultáneas y obligará a rehacer periódicamente el calendario de trabajo. Esta situación, que es frecuente encontrarla en las pequeñas o medianas empresas, pejudica enormemente el mantenimiento del sistema documental del proyecto y en definitiva de la calidad con la que se produce la aplicación.

Siempre es aconsejable elaborar un organigrama de la esructura que soportará la producción de una aplicación. Si este organigrama se realiza a modo de mapa conceptual y se especifica el flujo de la actividad se evitarán duplicidades en las comunicaciones y en la documentación y se facilitarán los procesos iterativos de corrección en la planificación.

En el gráfico siguiente se muestra la estructura de perfiles relacionados con el Laboratorio de Aplicaciones Multimédia en el año 2011.

Este mapa se realizó identificando cada uno de los perfiles con cada una de las personas que formaban en aquel momento el equipo de trabajo. Esta relación biunívoca no suele ser frecuente, y en cambio sí que lo es qe una persona ocupe varios roles en el proceso.

Actualmente podemos encontrar muchas referencias de procesos para la producción de TICs , la mayoría de ellas están basadas en la experiencia del profesional que la publica, otros casos han sido ideados para situaciones concretas. En general el proceso con el que vamos a trabajar personalizarse a las caracteríticas de nuestra organización.

En el siguiente gráfico podemos apreciar una original representación del proceso de John Furners para la Simple Square en el 2011

Ref: El proceso de Diseñar una web, John Furness. http://www.simplesquare.com/blog/infographics/a-web-site-designed/

Ref: Las 5 etapas del proceso de producción, NATHAN. http://www.nathan.com/thoughts/process/

En cuanto a los procesos relacionados con la usabilidad y con la accesibilidad, cabe decir que se basan en los procesos de producción genéricos, y que por tanto pueden considerse como adaptaciones que permiten obtener una parte de los resultados concretos del proyecto. Desde el punto de vista de este autor, las actuaciones requeridas en ambos casos pueden integrarse en el sistema de calidad, por poderse considerar a la dos como instrumentos que permiten medir y evaluar la calidad del diseño realizado.